La biodiversidad es una característica de la vida, que relaciona la variedad y la variabilidad de todos los organismos vivos. Incluye tres niveles: el genético, el taxonómico y el ecológico.
- La diversidad genética, corresponde a la variación de los genes de una población biológica y entre poblaciones.
- La diversidad taxonómica se refiere a la cantidad de especies y número de individuos de cada una de estas.
- La diversidad ecológica está compuesta por los diferentes ecosistemas que conforman la biosfera, y poseen un flujo característico de energía y materia entre ecosistemas (Portal Educativo, 2016).
La biodiversidad sustenta la existencia del ser humano y todas las especies del mundo, también sustenta nuestra economía y desarrollo social. Esta ocupa un papel vital en las diversas interacciones que componen los ecosistemas, cualquier alteración en la organización de los elementos que constituyen la variedad de formas de vida en la Tierra trae consigo consecuencias.
Además, gracias a la biodiversidad el ser humano obtiene distintos beneficios que le permiten:
- Beneficios directos, que se extraen principalmente de plantas y animales del ecosistema en forma de alimentos, medicinas, materias primas y recursos genéticos;
- Beneficios indirectos, que surgen de las interacciones y retroalimentaciones de los organismos que componen el ecosistema, tales como purificación de aire y agua, control de la erosión, almacenamiento de agua, polinización y dispersión de semillas, entre otros (Universidad de Chile, s.r.).
Es posible que al hablar de biodiversidad lo primero que se venga a la mente es flora y fauna pues ambas pueden observarse fácilmente en la naturaleza y los distintos ecosistemas. Mientras la fauna es el conjunto de especies animales que habitan en una región geográfica, la flora es el conjunto de las plantas y especies vegetales que pueblan un lugar determinado (Icarito, s.r.). Sin embargo, la biodiversidad comprende todas las formas de vida en nuestro planeta Tierra no solo a la flora y fauna, comprende desde una bacteria microscópica a grandes animales, incluye a las plantas, los hongos, los microorganismos, la diversidad genética y ecosistemas completos en selvas, bosques, desiertos, mares y otros.
Los seres humanos también formamos parte de la biodiversidad, pero del mismo modo, somos la especie que más pone en peligro la riqueza de ésta por consecuencia del efecto de las actividades humanas que se han visto magnificadas en el último tiempo debido al crecimiento demográfico y el cambio climático global; así, la influencia antropogénica ha reducido en gran medida la biodiversidad en los ecosistemas de la región y del mundo entero (UNESCO, 2017). Su puesta en riesgo se ha exacerbado como nunca antes producto de la destrucción y fragmentación de hábitats, la deforestación, la sobreexplotación de los recursos naturales, la contaminación, la introducción de especies exóticas y el cambio climático las cuales son responsables de la pérdida y el deterioro de la biodiversidad.
Actualmente, la deforestación amenaza gravemente la biodiversidad en América Latina y el Caribe, que posee la segunda tasa más alta de deforestación a nivel mundial, poniendo en riesgo la preservación de los recursos naturales que a su vez sostienen la seguridad alimentaria (FAO, 2016a). Según la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura UNESCO (2017) esta región cuenta con ecosistemas de importancia mundial, incluyendo 5 de los 10 países con mayor diversidad del planeta (Brasil, Colombia, Ecuador, México y Perú), así como también el área de mayor diversidad biológica en el mundo: la vertiente Oriental de los Andes.
Según los datos más recientes, la deforestación supone la segunda causa principal del cambio climático después de la quema de combustibles fósiles, y representa alrededor del 20% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo, correspondiendo a lo que equivalen las emisiones de todo el sector de transportes del planeta. No obstante, deteniéndose y reduciéndose la deforestación tropical se podría obtener entre un 24% y un 30% del potencial total de mitigación (FAO, 2018).
La deforestación es un proceso que destruye la superficie forestal, y puede deberse a causas naturales y/o humanas como incendios forestales, pastoreo intensivo y principalmente la tala de bosques para la industria maderera o para la obtención de suelo para uso agrícola o urbano. La deforestación implica dejar sin hogar a miles de especies que viven en aquellos árboles y/o que dependen de estos provocando un daño al equilibrio del ecosistema y la biodiversidad. Los bosques son el hábitat de millones especies, y permiten el flujo génico entre las poblaciones y son reguladores del clima, conservando la humedad de los suelos y absorbiendo gran parte del dióxido de carbono que generamos (Portal Educativo, 2016). Se tiene conocimiento de que el 70% de los animales y plantas habitan los bosques de la Tierra, de los cuales muchos no logran sobrevivir a la deforestación que destruye su medio (National Geographic, 2010).
Si se detiene y reduce la deforestación tropical se podría obtener entre un 24% y un 30% del potencial total de mitigación (FAO, 2018). Por otro lado, en los últimos 25 años se ha producido la mayor parte de la pérdida de superficie forestal en zonas de clima tropical de Latinoamérica y el Caribe, lugar donde simultáneamente la población va en aumento, especialmente en zonas rurales (FAO, 2016b: 32). La deforestación también afecta a millones de personas en el mundo, y especialmente a los más pobres y vulnerables que habitan en áreas rurales, viven y son dependientes en gran medida de los recursos naturales, bienes y servicios ambientales de los bosques. La detención de la deforestación ayudará a combatir el cambio climático, proteger los hábitats del 75 % de la biodiversidad terrestre a nivel mundial y mantener la resiliencia de los ecosistemas, respaldando además la agricultura sostenible (FAO, 2016b: 32).
De acuerdo a datos de la OCDE (2012), a nivel global el deterioro agregado de biodiversidad y de los beneficios de los ecosistemas de bosques, se estiman entre 2 y 5 billones de dólares cada año. La biodiversidad está relacionada con el desarrollo porque este depende de la interacción con el medio ambiente y otras especies. El mundo que hoy conocemos está siendo puesto en jaque producto de las acciones del ser humano, siendo que incluso nosotros mismos somos dependientes y somos parte integral de la naturaleza. Es vital hacerse cargo de la pérdida de biodiversidad ya que esta se vincula no solo con el bienestar humano sino que con el desarrollo sostenible a nivel planetario.
La Secretaría del Convenio sobre la Diversidad Biológica (2014: 3), manifiesta que en base a las tendencias actuales, las presiones sobre la diversidad biológica continuarán aumentando por lo menos hasta 2020, y que el estado de la diversidad biológica continuará deteriorándose, a pesar de que han aumentado las respuestas a la pérdida de diversidad biológica. Esto puede deberse en parte a las demoras entre que se adoptan medidas positivas y que esas medidas arrojan resultados positivos discernibles. Pero también podría deberse a que las respuestas son insuficientes para hacer frente a las presiones, de manera que no alcanzarían a contrarrestar los crecientes efectos de los impulsores de la pérdida de diversidad biológica. Teniendo esto en consideración es que debemos cuidar nuestro entorno natural pero también es necesario exigir su protección con medidas más profundas.
Como bien sabemos, Chile es un país extenso con diversos climas y características geográficas que han favorecido la expresión de un alto nivel de endemismo, lo que quiere decir, que existen especies que solo se encuentran en un área de distribución única y limitada por lo cual cuenta con una biodiversidad significativa en su territorio la cual todos debemos proteger.
En este sentido, Chile ha asumido compromisos importantes a nivel internacional que implican la protección de la biodiversidad de la que disfruta, tales como el “Convenio sobre Diversidad Biológica” que ratificó en 1994, el cual posee tres objetivos principales: la conservación de la diversidad biológica, la utilización sostenible de sus componentes, y la participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos (Naciones Unidas, s.r.). Más recientemente ha adoptado la agenda 2030 y sus correspondientes Objetivos de Desarrollo Sostenible, los cuales están direccionados a promover medidas que conduzcan a un futuro sostenible.
Queremos que tú también puedas formar parte de un cambio positivo que promueva el cuidado y protección de la biodiversidad así que ¡te invitamos a reforestar en tu comunidad, te aconsejamos preferir especies nativas, y recuerda reducir, reusar y reciclar para cuidar el medio ambiente y nuestros ecosistemas!
Bibliografía
Icarito. (s.r.). Ciencias Naturales, Organismos, ambiente y sus interacciones: Flora y Fauna. Disponible en: http://www.icarito.cl/2009/12/25-2004-9-flora-y-fauna.shtml/
Naciones Unidas. (s.r.). Convenio sobre la Diversidad Biológica. Disponible en: http://www.un.org/es/events/biodiversityday/convention.shtml
National Geographic. (2010). Deforestación. Disponible en: https://www.nationalgeographic.es/medio-ambiente/deforestacion
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura FAO. (2016a). Ministros de América Latina y el Caribe trazan una ruta hacia la agricultura sostenible. Disponible en: http://www.fao.org/americas/noticias/ver/es/c/421106/
FAO. (2016b). El estado de los bosques del mundo 2016 Resumen.
FAO. (2018). Se acaba el tiempo para los bosques: su superficie sigue reduciéndose. Disponible en: http://www.fao.org/americas/noticias/ver/es/c/1144235/
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos OCDE. (2012). Perspectivas ambientales de la OCDE hacia 2050, Consecuencias de la inacción, Puntos principales.
Portal Educativo. (2016). Biodiversidad en Chile. Disponible en: https://www.portaleducativo.net/contenidos-psu/40/3/biodiversidad-en-chile
Secretaría del Convenio sobre la Diversidad Biológica (2014) Perspectiva Mundial sobre la Diversidad Biológica 4 – Resumen y Conclusiones. Montreal, 20 páginas.
UNESCO. (2017). Biodiversidad. Disponible en: http://www.unesco.org/new/es/office-in-montevideo/natural-sciences/ecological-sciences/mab-lac-themes/biodiversidad/
Universidad de Chile. (s.r.). Línea Biodiversidad. Metodología para el cálculo de valor de Bienes y Servicios Ecosistémicos. Contexto. Disponible en: http://www.uchile.cl/portal/investigacion/programas-de-investigacion-domeyko/linea-biodiversidad/proyectos-e-iniciativas/metodologia-para-el-calculo-de-valor-de-bienes-y-servicios-ecosistemicos/51972/contexto
One thought on “¿Qué es la Biodiversidad?”